Jorge Drexler ya tenía en nuestro país muchos oídos atentos a su música, para cuando en 2005 ganó el Oscar “Al mejor tema musical” por "Al otro lado del Río", canción compuesta especialmente para la película "Diarios de Motocicleta" de Walter Salles. Pero fue este batacazo en el centro de la industria cinematográfica lo que despertó la atención de la actriz Romina Tamburello; y así se puso a escuchar al uruguayo.
“Empecé a escuchar a Jorge Drexler después del suceso del Oscar, me parecía un rebelde sudamericano, que se había rebelado en contra del Oscar y me dije: “qué hará este tipo, cómo cantará”, la verdad antes no lo conocía”, comenta Tamburello y agrega: “Lo empecé a escuchar con este disco, "12 segundos de oscuridad", que él lo saca después de haber ganado el Oscar, y al principio digo “que bueno lo que un tipo con una voz y una guitarra puede hacer, me parecía que el disco tenia una simpleza increíble, y que Drexler era ante todo un autor de letras hermosas. Y después, cuando lo volví a escuchar empecé a entender que este disco tiene un montón de sutilezas; como en “12 segundos de oscuridad” que está el sonido de un faro que atraviesa la canción durante todo el tema”.
Esta imagen potente y silenciosa sintetiza “cómo los navegantes de la vida debemos seguir adelante también en la oscuridad", explicaba el propio uruguayo en una entrevista del momento. Tuvo que "vaciar la cabeza de viajes, entrevistas, ruido, conciertos y cámaras" y enfrentarse al desgaste, la incertidumbre y la desorientación”, para poder escuchar su propia voz. Así, a tientas, afianzándose de a poco en otro tipo de dudas, empezó a vislumbrar su octavo disco que tiene "aires de tango, hip-hop, milonga y Radiohead".
“El disco funciona como diario de un periodo en que aprendí a relacionarme con la soledad -contaba Drexler-. Fue en Cabo Polonio, en Uruguay. Alquilé un rancho sin electricidad y me refugié a componer. Un lugar muy salvaje: no puedes recorrer en coche los últimos siete kilómetros. El título hace referencia al faro, donde la luz tiene un ciclo de 12 segundos. Para moverte allí de noche, debes guiarte por el faro y parar cuando te toca oscuridad. Así que el título es la alegoría de ese momento duro de mi vida, entre dos luces. Pero incluso la oscuridad te da información importante: los 12 segundos de Cabo Polonio lo diferencian del faro más cercano, que tiene un ciclo de 36 segundos. Allí apliqué eso de que puedes sacar enseñanzas esenciales de los momentos bajos de tu vida, cuando estás literalmente solo. Como dice Caetano, ‘nunca el mero acto de escribir una canción fue tan desesperadamente necesario”."
Con la producción de Juan Campodónico, y grabado por los integrantes de Bajofondo Tango Club (Juan Campodónico, Javier Casalla, Gabriel Casacuberta y Luciano Supervielle) y por la banda de Drexler, el álbum cuenta con las colaboraciones de Kevin Johansen, Leonor Watling, María Rita, Paulinho Moska, Arnaldo Antunes o Pablo Drexler.
Simpleza y franqueza son los términos que utiliza Romina Tamburello para definir las canciones de Drexler. Un estilo autoral que se hace escuchar en una época llena de ruido: “Ante todo me pareció increíble poder empezar a escuchar a alguien que en esta época donde todos queremos mostrar lo que sabemos y hablamos de nuestro curriculum, sea tan simple. Jorge Drexler no se quiere mostrar cool, no le interesa educarnos, ni bajar línea. Es un escritor increíble que dice lo que le parece sin juzgar a nadie, sin intentar imponer una postura, con mucha sensibilidad y sencillez”.
“Su universo es hermoso. Él cuenta que lo grabó (al disco) inspirado en Cabo Polonia, una playa uruguaya, en muchos de estos temas se ve la inspiración de ese lugar. Además es un disco rutero. Uno puede empezar a viajar y escucharlo durante horas… en un auto, en colectivo, caminando, y todo el tiempo son imágenes que a uno se le representan. Drexler tiene eso, esa manera de contar que hace que nosotros podamos imaginarnos la película de su canción”, dice la dramaturga y actriz de la obra “Mujeres de ojos negros”.